Mitos y Leyendas de Paraguay
PARAGUAY
Mitología y leyendas populares de Paraguay: un viaje por el mundo guaraní
Paraguay, con su profunda raíz guaraní y su mestizaje cultural, posee una mitología rica, diversa y fascinante que ha sido transmitida por generaciones a través de la tradición oral. Sus leyendas reflejan la conexión estrecha entre el ser humano, la naturaleza y el mundo espiritual, mostrando tanto el respeto como el misterio que envuelve al entorno natural y social.
A continuación, un panorama general de algunos de los mitos y seres míticos más emblemáticos del folklore paraguayo, muchos de los cuales comparten características y nombres con regiones vecinas pero mantienen un sello particular:
¿Quiénes fueron Tau y Keraná?
Estos dos personajes vienen del folklore guaraní, o sea que su historia forma parte de los mitos originarios del área que hoy comprende Paraguay, parte de Argentina, Brasil y Bolivia. Su mito es clave para explicar el origen de los siete monstruos guaraníes.
🟤 Tau: el espíritu del mal
Tau no es exactamente el “diablo” cristiano, pero se lo presenta como el espíritu del mal o del caos en la mitología guaraní.
Fue creado por Tupã, el Dios supremo, para que haya equilibrio entre el bien y el mal.
A veces se lo muestra como un ser tentador, manipulador o destructor.
⚪ Keraná: la mujer humana
Keraná era una hermosa joven, hija del primer hombre guaraní llamado Marangatu.
Su belleza era tal que Tau se enamoró perdidamente de ella.
💀 ¿Qué pasó entre ellos?
Tau trató de conquistarla, pero ella lo rechazó.
Entonces, Tau decidió secuestrarla con ayuda de su hermano Angatupyry (el espíritu del bien), pero fue vencido.
Más adelante Tau logró raptarla y la llevó a vivir con él en la oscuridad.
De esta unión forzada entre el espíritu del mal y la joven humana nacieron siete hijos monstruosos, que son súper famosos en la mitología guaraní.
🧟♂️ Los 7 hijos de Tau y Keraná (los monstruos guaraníes):
1. Teju Jagua – Hombre-lagarto con siete cabezas.
2. Mbói Tu’i – Ser mitad serpiente, mitad loro.
3. Moñái – Ser volador, guardián de los tesoros.
4. Jasy Jateré – Niño rubio, espíritu del mediodía que roba niños.
5. Kurupí – Hombre bajo, peludo, con un pene largo enrollado a la cintura (sí, en serio 😅).
6. Ao Ao – Bestia parecida a un carnero que devora gente.
7. Luisón – El hombre perro, asociado a la muerte (como un "guaraní lobo").
🎯 En resumen:
Tau = espíritu del mal.
Keraná = mujer humana secuestrada por Tau.
Juntos son los padres míticos de los siete monstruos guaraníes.
Es un mito fascinante porque mezcla creación, castigo, moralidad, y el origen del miedo a lo desconocido. Muy útil si estás armando algo de folklore regional o simplemente para entender cómo los pueblos guaraníes explicaban el bien, el mal y el miedo.
🔥 Otros personajes muy populares en Paraguay
8. Karai Octubre (Karai Jarýi) – Señor del fuego y la escasez. Sale en octubre con un látigo de fuego a castigar a los perezosos y sucios.
9. Pombero – Espíritu protector de la selva y guardián de la naturaleza, conocido por sus bromas y por proteger la fauna y flora. Hace bromas, roba cosas, enreda cabellos y puede embarazar mujeres.
10. Plata Yvyguy – Leyenda sobre tesoros enterrados por los paraguayos durante la Guerra de la Triple Alianza. Se dice que los fantasmas protegen estas riquezas.
11. La mujer del estero – Mujer encantada que aparece cerca de lagunas para hipnotizar hombres.
12. La dama de blanco – Espíritu femenino que aparece en caminos y cruces, como parte de las leyendas urbanas.
13. El jinete sin cabeza – Sí, también está en Paraguay con su propia versión.
14. Karai Pyhare – El señor de la noche, que aparece para castigar a quienes desobedecen normas sociales.
15. El Carãu: el ave sagrada de la mitología guaraní
16. Tañir Ru: Espíritu de la muerte o el alma errante.
17. La Viuda del Cerro: Fantasma o espíritu femenino que aparece en las montañas, símbolo de tragedia y advertencia.
18. Mbói Tu’ĩ: Ser mitad serpiente, mitad ave, ligado a la selva y los elementos.
👣 También hay muchos mitos relacionados a la naturaleza:
Árboles encantados (como el ñandypa).
Espíritus del monte (Ka’añý, Yvyra’i, etc.).
Animales que tienen un papel mítico (como el tatá yvyguy, fuego errante que guía a tesoros enterrados).
Estas figuras mitológicas representan una cosmovisión donde la naturaleza es sagrada, y cada ser o fenómeno natural está habitado por espíritus que pueden ayudar o castigar según el comportamiento humano.
Las leyendas paraguayas no solo entretienen, sino que también transmiten valores, enseñanzas y el respeto hacia la tierra, los animales y los ancestros.
Aquí en detalle algunos seres místicos:
El Pombero: el guardián travieso y misterioso de la selva paraguaya
Nombre: Pombero (también conocido como Pombero Kuimba’e)
Origen geográfico y cultural: Paraguay, especialmente en las regiones rurales y en la mitología guaraní. Su influencia se extiende a zonas de Argentina y Brasil donde habitan comunidades guaraníes.
Historia popular:
El Pombero es un espíritu de la naturaleza, considerado el guardián de la selva, los bosques y los animales. Es un ser pequeño y robusto, cubierto de pelo, con manos grandes y pies al revés, lo que le permite caminar sigilosamente y hacer bromas o travesuras sin ser detectado. Es nocturno y se dice que aparece al caer la noche.
Se cree que protege la fauna y flora del bosque, castigando a quienes destruyen el entorno o cazan sin permiso. Pero también es conocido por su carácter pícaro y travieso: puede hacer ruidos, mover objetos, asustar a las personas o incluso robar pequeños objetos. En algunos relatos, se dice que puede atraer a las mujeres jóvenes con su canto misterioso.
Para apaciguar al Pombero, las personas le dejan ofrendas, como tabaco, miel o bebidas alcohólicas, especialmente antes de entrar en la selva o para proteger la cosecha o el hogar. También se le respeta para evitar su ira o sus bromas pesadas.
Interpretación simbólica:
El Pombero encarna el respeto a la naturaleza y la necesidad de convivir en armonía con ella. Representa la conexión espiritual entre los humanos y el bosque, y recuerda que la naturaleza está viva y vigilante. Su figura refleja la incertidumbre y el misterio que siempre ha rodeado a los espacios naturales profundos y salvajes.
Además, el Pombero es una figura que mantiene viva la tradición oral guaraní y el vínculo cultural con el entorno natural.
Jasy Jatere: el guardián travieso de los sueños y la siesta
Nombre: Jasy Jatere
Origen geográfico y cultural: Paraguay, especialmente en la mitología guaraní, con presencia también en regiones limítrofes de Argentina y Brasil.
Historia popular:
Jasy Jatere es uno de los seres míticos más conocidos de la mitología guaraní. Se le describe como un pequeño hombrecito de cabello rubio o dorado, de estatura baja y con un bastón o cayado. Es conocido como el guardián de la siesta y de los sueños, apareciendo durante las horas del descanso para cuidar a los niños o, en algunos relatos, para secuestrar a aquellos que no respetan las reglas de la siesta.
Se dice que Jasy Jatere vive en los bosques y campos, y que camina descalzo, dejando un rastro de luz. Es travieso y juguetón, pero también peligroso para los niños que no obedecen a sus padres y salen a jugar cuando deberían estar durmiendo la siesta. En algunas versiones, se cree que secuestra a estos niños y los lleva a su refugio, donde pueden perderse o regresar transformados.
Para evitar encontrarse con Jasy Jatere, los niños deben respetar las horas de descanso y no adentrarse solos en el monte. También se cree que Jasy Jatere protege los cultivos y la naturaleza, castigando a quienes dañan el entorno.
Interpretación simbólica:
Jasy Jatere representa el respeto por el descanso y la conexión con los ritmos naturales del día. Su figura simboliza la importancia de la siesta, una pausa necesaria para la salud y el equilibrio, especialmente en el clima cálido del Paraguay.
Además, es un recordatorio de la presencia de lo mágico y misterioso en la naturaleza y de la necesidad de respetar las normas para convivir en armonía con el entorno.
🐺 Luisón / Lobisón / Lovisón
Origen:
El Luisón forma parte de la mitología guaraní, y es uno de los siete hijos malditos de Tau y Keraná, figuras del imaginario ancestral paraguayo. Según la leyenda, el séptimo hijo varón estaba destinado a convertirse en este ser tenebroso. La creencia del lobisón se mezcla también con mitos europeos sobre hombres-lobo, traídos durante la colonización, y adaptados por la cultura guaraní.
Descripción:
El Luisón es una criatura humanoide, generalmente descrita como un hombre delgado, de piel grisácea o ennegrecida, cubierto de pelos y con un hedor insoportable. Tiene garras, colmillos y ojos brillantes. Se lo asocia a la noche, a los cementerios y a la muerte. En algunas versiones, se transforma solo los martes y viernes, en especial si son días de luna llena.
Historia popular:
Se cuenta que el Luisón aparece en las noches oscuras, vagando entre tumbas o callejones solitarios, en busca de restos humanos, carroña o animales muertos. También puede atacar a los vivos si lo sorprenden. Se dice que es más frecuente en los pueblos del interior, donde las personas todavía guardan respeto y miedo por su figura.
En muchas zonas rurales, cuando se escucha a un perro aullar en la madrugada, se dice: "Es el Luisón que anda suelto."
Simbolismo:
El Luisón representa el miedo a la muerte, la descomposición, lo prohibido y lo maldito. En algunos relatos también se lo ve como castigo a la impureza o a la ruptura de normas sociales (como tener muchos hijos sin bautizar o nacer en días específicos). Se lo asocia con la brujería y la transformación del alma en bestia.
Relatos y versiones:
En varias regiones de Paraguay, la leyenda dice que el séptimo hijo varón de una familia sin hijas se convertirá en Luisón al cumplir los 13 años, y comenzará a transformarse en las noches.
Algunos pueblos cuentan que una mujer que se cruza con el Luisón queda marcada con mala suerte o infertilidad.
También existe una versión en la que el Luisón solo puede ser liberado de su maldición si un cura lo bautiza con agua bendita en pleno cementerio.
Hay familias que colocan cuchillos o cruces bajo la almohada de los recién nacidos para evitar que el mal caiga sobre ellos.
Kurupí: el símbolo de la fertilidad y la sexualidad en la mitología guaraní
Nombre: Kurupí (también llamado Curupí o Kurupí Porã)
Origen geográfico y cultural: Mitología guaraní, principalmente en Paraguay, con presencia en regiones de Argentina, Brasil y Bolivia donde habitan comunidades guaraníes.
Descripción y características:
Kurupí es un ser mitológico que representa la fertilidad masculina y la sexualidad desbordante. Se le describe como un hombre pequeño, con cuerpo cubierto de pelo, rostro grotesco y, especialmente, con un atributo muy llamativo: un pene extremadamente largo y flexible, que puede enrollarse sobre su cuerpo o extenderse para alcanzar grandes distancias.
Su imagen suele ser una mezcla entre lo cómico y lo inquietante, y forma parte de la mitología popular donde se le atribuyen poderes para influir en la fertilidad de la tierra, los animales y las personas.
Historia popular:
En las leyendas guaraníes, Kurupí es un espíritu travieso y a veces peligroso. Se dice que ronda por la selva y zonas rurales, seduciendo a mujeres y causando embarazos inesperados. A menudo es utilizado en relatos para explicar nacimientos misteriosos o fuera de matrimonio, y para advertir a jóvenes y mujeres sobre los riesgos de la promiscuidad o la falta de cuidado.
Kurupí también está relacionado con la abundancia y la prosperidad de las cosechas, ya que su energía sexual se asocia con la fertilidad de la tierra. Por eso, en algunas tradiciones se le hacen ofrendas para asegurar buenas cosechas y la prosperidad familiar.
Interpretación simbólica:
Más allá de su imagen folclórica, Kurupí simboliza la fuerza vital masculina y el poder de la naturaleza para crear y renovar la vida. Representa el ciclo natural de la vida, la reproducción y la conexión profunda con la tierra fértil.
Su figura también refleja la relación ambivalente entre el deseo, la moralidad social y la naturaleza humana, manifestada en mitos que mezclan lo sagrado con lo profano.
Tañir Ru: el espíritu de la muerte en la mitología guaraní
Nombre: Tañir Ru
Origen geográfico y cultural: Mitología guaraní, especialmente en Paraguay y zonas aledañas con influencia guaraní.
Descripción y características:
Tañir Ru es el espíritu o entidad que representa la muerte en la cosmovisión guaraní. Su nombre puede traducirse como “Señor de la muerte” o “Dueño del camino final”. Se le considera un ser sombrío y poderoso, encargado de guiar las almas de los difuntos hacia el más allá.
A diferencia de representaciones occidentales de la muerte, Tañir Ru no es necesariamente un ente maligno; más bien cumple una función esencial dentro del ciclo de la vida, ayudando a las almas a transitar el camino hacia el mundo espiritual.
Historia popular:
En la tradición guaraní, se cree que Tañir Ru aparece cerca de personas que están por morir o en momentos de transición entre la vida y la muerte. A veces se manifiesta como una sombra, un viento frío o una figura etérea.
Las comunidades guaraníes cuentan que respetar las ceremonias y ritos relacionados con la muerte ayuda a que Tañir Ru cumpla su función sin causar desgracias. También se le atribuyen poderes para proteger a las almas en su viaje, evitando que se pierdan o queden atrapadas en el mundo terrenal.
Interpretación simbólica:
Tañir Ru encarna el respeto ancestral por la muerte como parte natural e inevitable del ciclo de la existencia. Representa la conexión entre el mundo físico y el espiritual, y la importancia de los rituales para honrar a los antepasados y asegurar la paz de las almas.
Su figura invita a reflexionar sobre la vida, la muerte y la continuidad, y fomenta el respeto hacia los muertos y las tradiciones.
La Viuda del Cerro: un espectro trágico y tenebroso de la mitología paraguaya
Nombre: La Viuda del Cerro
Origen geográfico y cultural: Leyendas populares de Paraguay, especialmente en zonas montañosas y rurales.
Descripción y características:
La Viuda del Cerro es un fantasma o espíritu femenino que aparece en los cerros y montañas de Paraguay. Se la describe como una mujer vestida de blanco o negro, con un aspecto triste y desolado, que vaga por las noches en busca de su esposo o de justicia por alguna tragedia vivida.
Su presencia suele ir acompañada de una atmósfera inquietante, con sonidos extraños, suspiros o lamentos que se escuchan en la oscuridad, y a veces luces misteriosas en la cima de los cerros.
Historia popular:
Existen varias versiones de la leyenda, pero todas coinciden en que la Viuda del Cerro es el alma de una mujer que perdió a su esposo de forma trágica o injusta, y cuyo espíritu no encuentra descanso. En algunos relatos, la mujer murió esperando el regreso de su esposo o murió por tristeza profunda.
Se dice que la Viuda del Cerro aparece para advertir o castigar a quienes profanan o dañan los cerros, como una protectora silenciosa de esos lugares sagrados. Otros cuentan que su aparición es un presagio de desgracias o malos augurios para quienes la ven.
Interpretación simbólica:
La Viuda del Cerro representa el dolor, la pérdida y la injusticia, pero también la fuerza del amor y la memoria que persiste más allá de la muerte. Su figura es un llamado a respetar la naturaleza y la historia de los lugares, y a ser conscientes del sufrimiento humano detrás de las tragedias.
Esta leyenda también refleja el miedo y el misterio que envuelven a los espacios naturales y el poder de las emociones en la cultura popular.
El Carãu: el ave sagrada de la mitología guaraní
Nombre: Carãu (también conocido como Carau)
Origen geográfico y cultural: Mitología guaraní, especialmente en Paraguay y regiones vecinas con fuerte presencia guaraní.
Descripción y características:
El Carãu es un ave que en la mitología guaraní es considerada sagrada y portadora de un mensaje espiritual profundo. Se caracteriza por su canto melancólico y su plumaje oscuro, y es un símbolo de tristeza, sacrificio y lealtad.
Se dice que su canto es un lamento que recuerda la pérdida y el dolor, y a la vez un llamado a la memoria y la esperanza.
Historia popular:
Según la leyenda, el Carãu fue un joven valiente y leal que murió trágicamente y fue transformado en esta ave por el Dios supremo para que su espíritu siguiera presente en la tierra, cuidando a su pueblo y transmitiendo enseñanzas a través de su canto.
El Carãu es también símbolo de fidelidad, pues se dice que nunca abandona a su pareja ni a su hogar, permaneciendo siempre fiel y vigilante.
Interpretación simbólica:
El Carãu representa la conexión entre el mundo terrenal y espiritual, la importancia de la lealtad y el sacrificio, y la memoria colectiva de un pueblo que honra a sus héroes y ancestros.
Su canto melancólico recuerda que el dolor es parte de la vida, pero también que la esperanza y el recuerdo mantienen viva la esencia de quienes ya no están.
🐗 Ao Ao: es uno de los siete hijos de Tau y Keraná
Origen:
Ao Ao es uno de los siete hijos de Tau (el espíritu del mal) y Keraná, dentro del panteón mitológico guaraní. Su nombre proviene del sonido que emite al correr o al atacar: “ao ao”. Este ser forma parte de la mitología ancestral de Paraguay y del norte argentino, especialmente en las provincias con fuerte influencia guaraní.
Descripción:
Ao Ao es descrito como una bestia con forma de gran cerdo salvaje o tapir gigante, cubierto de un pelaje áspero, con colmillos enormes y mirada feroz. Es veloz, violento y con un apetito insaciable por carne humana. Tiene patas poderosas y un gruñido aterrador. Algunas versiones lo muestran con la habilidad de trepar árboles y seguir huellas humanas.
Historia popular:
Según la leyenda, Ao Ao habita los montes profundos y sale a cazar en las horas de más calor, especialmente cuando la gente se aventura sola por el monte o los caminos rurales. Se dice que persigue a sus víctimas incansablemente, emitiendo su característico grito mientras las acorrala. Solo hay una forma de salvarse: trepar a un karanda’y (palmera), árbol sagrado para los guaraníes, al cual Ao Ao no puede subir.
Simbolismo:
Ao Ao simboliza el castigo divino, la muerte brutal y el instinto más salvaje. Representa el terror ancestral que habita en lo profundo del monte, y la idea de que hay lugares donde el humano no debe pisar sin respeto. También encarna el miedo a lo desconocido y a lo incontrolable de la naturaleza.
Relatos y versiones:
En comunidades rurales, se cuenta que algunos leñadores han logrado escapar del Ao Ao trepando a un karanda’y y rezando hasta el amanecer.
En ciertos relatos, si el Ao Ao encuentra a alguien escondido, puede olfatearlo y esperar pacientemente abajo del árbol hasta que se caiga o baje por agotamiento.
Algunas leyendas aseguran que el grito del Ao Ao anuncia desgracias, y que si se lo escucha por la noche, conviene no salir por ningún motivo.
🌿 La leyenda guaraní de la yerba mate
Origen:
La leyenda proviene del pueblo guaraní, quienes fueron los primeros en utilizar la yerba mate (Ilex paraguariensis) como infusión. Más allá de su uso medicinal y ritual, existe un relato ancestral que explica el origen sagrado de esta planta, vinculada al agradecimiento, la generosidad y la conexión con lo divino.
Descripción:
La yerba mate es una planta nativa de la región subtropical de América del Sur. Se utiliza tradicionalmente para preparar una infusión estimulante, rica en cafeína y otros compuestos beneficiosos. Para los guaraníes, era más que una bebida: era un símbolo de hospitalidad, fuerza y comunidad.
Historia popular:
Cuenta la leyenda que una anciana llamada Yarí vivía en el bosque junto a su hija, sin más compañía que la naturaleza. Ya vieja y enferma, Yarí no podía salir a buscar alimento, por lo que su hija todos los días se adentraba al monte.
Un día, un viajero misterioso, que en realidad era el dios Tupã disfrazado de hombre, pasó por su hogar. La hija le ofreció lo poco que tenían para comer, y cuidó de él con amabilidad. El dios, conmovido por la generosidad de ambas, les ofreció un regalo divino para que no les faltara compañía ni salud: una planta verde cuyas hojas podían secarse, molerse y tomarse como infusión.
Tupã les enseñó a preparar el mate, y les dijo que desde entonces, quien compartiera esa bebida jamás estaría solo. Desde ese día, la yerba se convirtió en símbolo de amistad, encuentro y gratitud.
Simbolismo:
La yerba mate representa:
Hospitalidad y comunidad: es una bebida que se comparte en ronda, con un solo mate que pasa de mano en mano.
Sabiduría ancestral: el ritual de preparar y tomar mate conserva prácticas guaraníes.
Generosidad y recompensa: la leyenda enseña que un corazón bondadoso siempre será recompensado.
Conexión con la tierra: el mate proviene del monte, y su consumo es una forma de honrar la naturaleza.
Relatos y versiones:
En algunas versiones, el dios Tupã no solo regala la planta, sino que transforma a Yarí en la diosa protectora de la yerba mate, encargada de velar por quienes la cultivan y la comparten.
Otros relatos cuentan que la yerba fue sembrada por los mismos dioses como compensación a un pueblo que vivía en armonía con la naturaleza.
En muchas familias guaraníes, la ceremonia del mate sigue siendo un acto sagrado, cargado de respeto y espiritualidad.
Referencias y fuentes confiables:
Estudios antropológicos sobre la cosmovisión guaraní (Ej: León Cadogan)
Relatos populares recopilados en Paraguay y regiones vecinas
Documentación del Museo del Barro y archivos culturales guaraníes
Investigaciones contemporáneas sobre mitos y símbolos sexuales en América Latina
Investigaciones contemporáneas sobre mitología y folklore paraguayo
Documentación de ritos y ceremonias indígenas en el Archivo Histórico Nacional de Paraguay
Investigaciones sobre cosmovisión indígena y espiritualidad americana
🌱 Esta recopilación es un trabajo en evolución. Cada relato se construye con cuidado, respeto a la tradición oral y referencias de investigación. Si conocés una historia que falta o querés compartir una leyenda de tu región, escribime.
Comentarios
Publicar un comentario